El cuerpo humano es increíblemente diverso, y, una de las formas donde más se manifiesta es en la clasificación de los tipos de cuerpo, conocida como somatotipo. El ectomorfo es uno de los más conocidos, caracterizado por un cuerpo delgado, con poca masa muscular y una estructura ósea ligera. 

Aunque ser ectomorfo puede presentarse como un desafío cuando se busca ganar peso o masa muscular, también tiene ciertas ventajas que se deben tener en cuenta. El ectomorfo típicamente tiene un metabolismo más rápido que otros tipos de cuerpo, lo que significa que quema calorías de manera más eficiente. Aunque puede parecer ventajoso, a menudo se traduce en dificultades para ganar peso o masa muscular. 

Características del ectomorfo y su metabolismo rápido

Un ectomorfo suele tener ciertas características físicas que lo distinguen de otros tipos somáticos habituales, como el mesomorfo o el endomorfo. Entre las características más comunes de los ectomorfos se encuentran:

  • Estructura delgada y alargada: Los ectomorfos suelen tener extremidades largas, hombros estrechos y caderas estrechas.
  • Baja proporción de grasa corporal: A menudo los ectomorfos tienen poca o ninguna grasa visible en su cuerpo, incluso si no hacen ejercicio regularmente.
  • Dificultad para ganar peso y masa muscular: El metabolismo rápido que caracteriza a los ectomorfos hace que quemen calorías de forma más rápida, lo que dificulta ganar peso, incluso al comer cantidades de comida.
  • Alta tasa de metabolismo: Los ectomorfos tienden a quemar calorías rápidamente, lo que significa que necesitan consumir más calorías para mantener o aumentar su masa corporal.

Este metabolismo acelerado puede ser tanto una ventaja como una desventaja. Por tanto, la forma en la que se llevan a cabo los ejercicios en los entrenamientos es fundamental para sacar el máximo rendimiento a cada día de entreno.

Estrategias para aprovechar el metabolismo rápido de los ectomorfos

Aunque ser ectomorfo puede presentar ciertos desafíos, hay diversas estrategias que pueden ayudar a aprovechar este metabolismo rápido y maximizar los beneficios de esa condición. Si el objetivo es ganar masa muscular o mejorar el rendimiento físico, presentamos algunas recomendaciones clave.

Aumentar la ingesta calórica

Uno de los mayores desafíos de los ectomorfos es ganar peso y músculo debido a su metabolismo rápido. Para contrarrestar eso, es esencial aumentar la ingesta calórica. Algunos consejos prácticos son:

  • Un buen punto de partida es agregar entre 300 a 500 calorías extra a la dieta diaria e ir ajustando según los resultados.
  • Optar por alimentos nutritivos pero calóricos, como aguacates, frutos secos, mantequilla de almendras, aceites saludables y carnes magras. También es posible agregar carbohidratos complejos como avena, arroz integral y patatas.
  • Se recomienda probar a comer de 5 a 6 veces al día, incorporando snacks como batidos de proteínas, frutas y frutos secos entre comidas.

Entrenamiento de fuerza pesado

El objetivo es maximizar la estimulación muscular para que el cuerpo utilice las calorías extra que se consumen para desarrollar músculo en lugar de almacenarlas como grasa. Algunas recomendaciones incluyen:

  • Entrenamiento de fuerza: Hay que focalizarse en ejercicios compuestos como sentadillas, press de banca, deadlifts (levantamientos de pesos muertos) y dominadas, que trabajan múltiples grupos musculares a la vez.
  • Evolución de peso moderado a pesado: Se debe optar por un rango de repeticiones de 6 a 10 con pesos moderados o altos, buscando maximizar la carga.
  • Descanso adecuado: Hay que asegurarse de dormir entre 7 y 9 horas diarias y tomar días de descanso entre los entrenamientos intensos.

Priorizar las proteínas en la dieta

La proteína es un elemento fundamental para la construcción de músculo, y como ectomorfo, se necesitará una cantidad adecuada para aprovechar este metabolismo rápido y ganar masa muscular. Por tanto, es importante tener en cuenta algunos consejos sobre la proteína:

  • Consumo de proteínas: Los expertos recomiendan que los ectomorfos consuman al menos 1.6 a 2.2 gramos de proteína por kilogramo de peso corporal al día. Eso ayuda a la síntesis muscular y la recuperación tras los entrenamientos.
  • Fuentes de proteína: Se recomienda optar por fuentes de proteína magra como pollo, pescado, huevos, carne magra y fuentes vegetales como legumbres, tofu y quinoa. No obstante, en caso de no llegar al óptimo de consumo, se puede recurrir a suplementos de proteínas en los días de entrenamiento.

Mantener una mentalidad positiva y paciente

Como ectomorfo, es posible que no se vean resultados inmediatos, pero con persistencia y dedicación, se pueden lograr los objetivos de fitness. Por tanto, se debe tener una actitud positiva, seguir el plan nutricional y de entrenamiento, y no desanimarse si los progresos son más lentos que en otros tipos de cuerpo. Esto es algo habitual en este tipo de cuerpo, y, por ello, los resultados pueden tardar más en aparecer.

La clave está en ser constante, tener paciencia y ajustar los hábitos de acuerdo con lo que mejor funcione para cada uno. De esta forma, se aprovecha el metabolismo rápido a favor y se lleva el rendimiento físico al siguiente nivel.