¡Volvamos a analizar una técnica de entrenamiento para running! Stride es un sistema de entrenamiento que te permitirá mejorar tu entrada en calor y resistencia.


¿Alguna vez has estado corriendo en la recta final de una carrera, y sientes como que el reloj va cada vez más lento a medida que intentas llegar a la meta? ¿Deseas terminar aunque sea sólo un poco más rápido esa carrera para la que tanto te has esforzado durante los entrenamientos?

La técnica de carrera Strides podría ser la respuesta a lo que buscas. Este artículo se centrará en cómo utilizar la técnica de Strides, primero corriendo en pistas fáciles y luego aprendiendo cómo implementar avances en la fase de precalentamiento con el fin de lograr tus objetivos de carrera!

¿Qué es la técnica “STRIDES” en el running?

Strides proviene del inglés y está relacionado con la palabra “Zancadas”. Esta es una técnica de preparación que consiste en realizar unos Sprint de 20 a 35 segundos a un ritmo de carrera rápido, digamos a más o menos un 85-95% de esfuerzo.

Por lo general, se asignan en un programa de entrenamiento después de una carrera de recuperación fácil o antes de un gran entrenamiento o carrera. Los Strides también se utilizan como parte del proceso de precalentamiento para ayudar a que la sangre fluya a las piernas y que el ritmo cardíaco pueda elevarse antes de una carrera.

¿Cómo realizar la técnica STRIDE?

A continuación, presentamos una guía paso a paso para hacer la técnica STRIDE:

  1. Completa tu entrenamiento programado a un ritmo suave.
  2. Después de correr debes descansar durante varios minutos. Concéntrate en relajar el cuerpo, pero sin estirar.
  3. Comienza los Strides, acelerando a un ritmo rápido durante los primeros 5 segundos. Es importante ir progresivamente, y no explotar la marcha para evitar lesiones.
  4. Después de 5 segundos, deberías haber alcanzado la velocidad máxima (recuerden 85-95% de esfuerzo, no más).
    • Ahora deja que tu cuerpo haga el trabajo; mantén la cara relajada, asegúrate de que tus brazos no se están agitando, y trabaja en el aterrizaje pisando con la parte media del pie y no con el talón. Por último y luego de correr unos entre unos 15-25 segundos, comienza a desacelerar poco a poco hasta frenar en el transcurso de unos 5 segundos.
  5. Realiza una recuperación completa entre cada pasada, debería de ser de al menos de unos 2 minutos. Puedes parar, caminar, o correr lentamente en el lugar para recuperar el aliento.

El propósito de este tipo de pasadas no es llevar a cabo un entrenamiento duro o tener que respirar fuerte. La técnica de Strides está diseñada para entrenar la velocidad y la mecánica.

¿Cuáles son los beneficios de hacer strides en tu rutina de running?

Estas “zancadas” tienen muchos beneficios y se suelen utilizar en una multitud de maneras, dependiendo de lo que cada corredor este tratando de lograr. La técnica Strides ayuda a trabajar la técnica de carrera en distancias cortas. Es fácil centrarse en la forma de correr cuando sólo se hace durante 20 a 30 segundos y no estás muy cansado.

No sólo ayuda a crear claves mentales para sentirse relajado y usar correctamente los dedos de los pies, sino también hace que el proceso sea más natural para el cuerpo durante toda la carrera.

stirdes

En definitiva Strides es una gran pre-curso a correr más rápido, y sirve para adentrarse en un entrenamiento más riguroso. Básicamente nos hace adaptar a correr más rápido. Para los corredores de distancia, que pasan la mayor parte de su tiempo corriendo a velocidades lentas, esta técnica les ayuda a desarrollar los sistemas anaeróbicos y trabajar bajo este umbral.

Luego de algunas pasadas y de entrenar un par de días a la semana van a sentir como se les inyecta un poco más de velocidad en sus piernas. Por último, la técnica Strides puede servir como como un modo de «relajar» las piernas después de una sesión liviana. Muchas veces, especialmente en el entrenamiento de maratón, las piernas se quedan como inactivas por las carreras de alto kilometraje. Este tipo de pasadas ayudan a romper con la monotonía y añadir un poco de color al entrenamiento. Eso sí, siempre y cuando ya se hayan recuperado.