¿Alguna vez has terminado de entrenar en forma normal y a los siguientes días has sentido que tu cuerpo no se puede mover del dolor? Veamos por qué se genera el dolor post entrenamiento.
Supongamos la siguiente situación… al fin te decidiste a empezar a entrenar, te anotas en el gimnasio, tomas la bicicleta o te calzas las zapatillas de correr y das comienzo al fascinante mundo del entrenamiento muscular. Sigues la rutina al pie de la letra, y si bien notas que te ha costado algo de esfuerzo has terminado tu día de entrenamiento como corresponde.
Hasta ese momento uno se siente de maravilla, pero a las próximas horas (principalmente luego de dormir) y días posteriores al entrenamiento, sientes ese fuerte dolor muscular que a veces se convierte hasta en un problema para moverse libremente. Entonces te preguntas, ¿Me he lesionado? ¿Podré volver a entrenar? ¿Por qué duele tanto el cuerpo luego de entrenar? ¿Qué puedo hacer para eliminar el dolor?
Tranquilízate, es normal, vamos por partes e intentemos responder a estas preguntas.
El dolor despues de entrenar
Sentir dolor después de una actividad física es un fenómeno muy frecuente en las personas con escaso entrenamiento, e incluso, bajo ciertas circunstancias se da en atletas bien entrenados que realizan ejercicios aplicando diferentes técnicas con el fin de llevar el músculo siempre a su máximo potencial.
El fuerte dolor, hinchazón o dolor muscular posterior al día de ejercicio se suele denominar «DMAR» que significa “Dolor muscular de aparición tardía”; y no es más que un dolor muscular que se produce entre las 12 a 72 horas después de que uno haya realizado una actividad física intensa. Si, estos dolores pueden ser muy molestos y más aún si eres principiante, pero en personas dedicadas al entrenamiento es algo muy codiciados. Incluso, aunque pueda limitar hasta los movimientos naturales del cuerpo.
¿Cuál es la causa del dolor muscular luego de entrenar?
El “Dolor Muscular de Aparición Tardía” es a menudo causado por la realización de un entrenamiento intenso de cualquier índole. Por ejemplo, al realizar un ejercicio de epsas, y si este se hace correctamente, puede causar lesiones micro-musculares, lo que provoca una respuesta inflamatoria por parte de nuestro cuerpo.
Este va a formar productos de desecho del metabolismo, que junto a la estimulación de las terminaciones nerviosas provocan la sensación de dolor. A su vez se va a generar una acumulación de ácido láctico en entrenamientos dedicados al running, ciclismo, natación, fútbol o cualquier otro deporte aeróbico, en el que hayamos realizado una actividad por encima del umbral del lactato.
Puedes leer más sobre esto en este artículo: El umbral del lactato
En resumen, la sensación de dolor ocurre con los esfuerzos de alta intensidad, y en base a la frecuencia con que se realizan nuevos ejercicios no probados anteriormente o no habituales. Pero hay otros factores que pueden influir en la formación de DMAR, tales como el ángulo de la contracción, la velocidad a la que se ejecuta la contracción muscular y la rigidez natural.
¿Cómo aliviar el dolor muscular luego de entrenar?
El dolor asociado con el DMAR puede generalmente alcanzar un pico entre las 24 y 48 horas posteriores al ejercicio realizado, y empieza a aliviar dentro de los próximos 3-5 días (esto depende de la persona en cuestión y su grado de recuperación). Si bien debes esperar a que el dolor desaparezca por sí solo, aquí te dejo 3 consejos que puedes seguir para acelerar el proceso.
- LA RECUPERACIÓN ACTIVA: Básicamente consiste en realizar una actividad física de muy baja intensidad, que permita hacer circular la sangre para acelerar el proceso de eliminación de residuos metabólicos.
- LA RECUPERACIÓN PASIVA: Aparte de la recuperación activa, debemos tomarnos seriamente el proceso de descanso y recuperación que el cuerpo necesita para volver a un estado activo atléticamente hablando.
- USAR CALOR: El calor puede ayudar a aliviar el dolor muscular llevando más sangre hacia el área del dolor, y en consecuencia ayudando a acelerar la recuperación. También es muy bueno para relajar la zona. Con una ducha de agua caliente es suficiente, no es necesario aplicar calor seco.
En resumen, y para calmar tu ansiedad, déjame decirte que si eres es verdadero atleta puedes estar muy feliz por sentir este tipo de dolor, esto significa que has entrenado como debe ser y pronto verás las mejoras de ese entrenamiento!